DÍA INTERNACIONAL DE LA ENFERMERÍA 2020: HOY, LAS PROTAGONISTAS SOMOS NOSOTRAS

  • 19/05/20
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La enfermería "resiste". El DIE vive una edición muy especial por la celebración del Año Internacional de las Enfermeras y por la pandemia mundial. Pulse aquí para seguir en directo el Acto del DIE el 12 de mayo a las 18 horas

No hay precedentes. En apenas una semana la sociedad española al completo vivió un cambio rotundo por una pandemia del desconocido virus Covid-19 que ha paralizado este país y el mundo entero. El Gobierno decretaba el 15 de marzo un Estado de Alarma Sanitaria que aislaba a los ciudadanos y ponía en una situación extrema a los profesionales sanitarios. Dos meses después, el la Alarma continúa, aunque con menos restricciones, y el balance de la crisis es desolador: más de 220.000 contagiados en España y 26.000 muertes con Madrid y Cataluña a la cabeza en el ranking de enfermos por coronavirus.

En Cantabria la pandemia no llegó a saturar las unidades de UCI pero movilizó un enorme operativo que puso en jaque a la región, y ha causado 200 fallecidos y más de 2.600 contagios. Y al estar en primera línea de fugo, el colectivo de profesionales sanitarios fue muy castigado, en España se han registrado 30.000 contagios entre profesionales de la salud y más de 40 muertes: 3 enfermeras y 38 médicos.

Esta situación ha afectado muchísimo a la profesión en Cantabria, según el último informe del Consejo General de Enfermería, al 76 por ciento de las enfermeras cántabras les ha afectado mucho o bastante la pandemia, y esta cifra supera el 80 por ciento en el resto de España, porque han estado expuestas a situaciones extremas que producen estrés, miedo y ansiedad.

El DIE reconoce cada año la labor del colectivo, pero este 2020 es especial porque celebra el Año Internacional de las Enfermeras y ha sufrido la mayor crisis sanitaria de la historia reciente. Varias enfermeras de diferentes especialidades y servicios describen cómo han vivido la situación.

 

Laura García Blanco. "Enfermera planta Covid Liencres".

1.- ¿Cómo ha cambiado tu trabajo por la Alarma Sanitaria?

Normalmente, trabajo en la unidad de Hospitalización Domiciliaria del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla… Con la alerta sanitaria tuvimos que modificar muchos de nuestros protocolos habituales y nuestra dinámica de trabajo que, al igual que en otros servicios, conseguimos hacer gracias al esfuerzo de todos.

Sin embargo, en poco tiempo fui trasladada junto con otros compañeros a la tercera planta del Hospital de Liencres, la cual se transformó de la noche a la mañana en servicio Covid-19 y que ya se encuentra cerrada desde el pasado día 1 de mayo.

2.- ¿Has podido trabajar con el material de protección adecuado?

Sí, desde que llegué al hospital de Liencres a atender pacientes afectados por el COVID-19, conté con todo el material de protección necesario en cada momento: nos costó mucho adaptarnos a las circunstancias, pero desde luego no podemos decir que estuvimos desprotegidos. Me gustaría añadir que esto fue gracias a la tenacidad y perseverancia de nuestra supervisora, Mónica, que siempre antepuso la seguridad de todo el personal y se ocupó de que todos los turnos contaran con el material suficiente.

3.- ¿Crees que nuestro sistema estaba preparado para abordar esta crisis?

Considero que es una pregunta algo compleja y muy ambiciosa para intentar responderla en tan pocas líneas, pues influyen muchos factores. No creo que nadie estuviese preparado completamente para afrontar una situación como esta que, sin duda, no ha sido fácil. En rasgos generales, quiero ser positiva y pensar que contamos con unos recursos asistenciales suficientes para poder abordar problemáticas como la actual, pero desde luego se ha puesto en jaque a nuestro sistema de salud y ha sido todo un reto trasformar al completo la red asistencial en tan poco tiempo.

4.- ¿Y crees que ha habido suficiente ratio de enfermeras por pacientes?

Basándome en mi experiencia, puedo decir que sí. Nosotros hemos trabajado en Liencres con una ratio de 7-8 pacientes por enfermera en el peor de los casos, si bien es cierto que durante el mes que hemos estado allí no llegamos al 100% de la ocupación de camas. No obstante, en algún momento creo que si se reclamaron refuerzos, sobretodo del personal de auxiliar de enfermería ya que, aunque trabajamos en equipo y compartimos muchas de los cuidados y tareas, nuestros pacientes fueron en su mayoría dependientes y eso supone un aumento en la carga de trabajo, más en el contexto del que hablamos, con todas las medidas excepcionales de higiene que se han protocolizado.

5.- ¿Te ha aportado algo positivo esta situación?

Mucho. A nivel profesional, el desarrollo aún más si cabe de la capacidad de adaptación a las circunstancias. En mi caso particular he vivido la transformación de un servicio y la creación de otro nuevo en un corto periodo de tiempo... pero ha sido esta última la que realmente me ha supuesto un reto, al llegar a un servicio que no existía previamente, con un equipo formado de cero, cuyos profesionales no se conocían entre sí, y con una dinámica de trabajo aún por consolidar.

También me ha hecho valorar mucho más la necesidad de humanizar los cuidados de enfermería, así como el trabajo que desarrollan otros compañeros con uniforme de distinto color al mío. Cosas que siempre deberían estar presentes, pero de las que a veces perdemos la perspectiva cuando estamos muy inmersos en la rutina.

A nivel personal, me llevo nuevos valores y madurez después de haber compartido una experiencia muy intensa con grandes profesionales y colegas. Una experiencia en la que ha habido sudor, aplausos, sonrisas y alguna que otra lágrima.

6.- Por último, dinos qué debemos cambiar a tu juicio después de haber puesto a prueba el SCS con esta pandemia.

Creo que se debería de continuar en la línea de la formación y especialización del personal de enfermería: nos hemos visto en la necesidad de formarnos a marchas forzadas ya que no había personal suficiente para cubrir las necesidades de algunos servicios; no son las mejores condiciones para el proceso de aprendizaje, aunque no ha habido otras.

 

Nuria Marina Talledo. "Unidad de Cuidados Intensivos del HUMV.".

1.- ¿Cómo ha cambiado tu trabajo por la Alarma Sanitaria?

Yo soy enfermera de UCI. Mi servicio consta de varias salas que se fueron adaptando a medida que los pacientes COVID necesitaban ingreso en estas unidades.
Además había que asegurar que el resto de pacientes (no COVID) también fueran atendidos con total seguridad, por lo que se dejaron dos salas para la atención de los mismo. En mi caso, me tocó seguir atendiendo a los pacientes "no COVID" en la sala de la UCI donde ingresan los pacientes politraumatizados entre otros. Y en esta sala hemos vivido otra realidad derivada del confinamiento y ha sido pacientes que han sufrido intentos autolíticos, lo que añade otro drama al propio de la enfermedad.

2.- ¿Has podido trabajar con material de protección adecuado?

Como he comentado anteriormente, en principio mis pacientes no eran pacientes Covid, por lo que nosotros no disponíamos de Epis para el trabajo diario, sólo en caso de ingresos sospechosos disponíamos de estos equipos para la atención en un primer momento.
A pesar de que nuestros pacientes no fueran Covid, dado que los ingresos provienen de su casa en muchos casos, decidimos protegernos al máximo y para ello utilizamos las pantallas protectoras.

3.- ¿Crees que nuestro sistema estaba preparado para abordar esta crisis?

Por suerte, en nuestra comunidad no hemos vivido el volumen de pacientes que se ha dado en otras comunidades como ha podido ser Madrid. No habíamos vivido antes una situación similar, pero se ha trabajado para adaptar unidades de todo tipo para la recepción y atención de estos pacientes. Seguramente si volviera a ocurrir, ya tenemos la experiencia de estos meses lo que hará que nos podamos adelantar en el proceso organizativo.

4.- ¿Crees que ha habido suficiente ratio enfermera paciente?

Como he explicado anteriormente se han abierto nuevas salas para atender a estos pacientes que requerían UCI, para ello hemos necesitado el refuerzo de personal ya que se ha duplicado el número de camas. Hemos tenido la ayuda de compañeros de uci que en estos momentos pertenecen a Atención primaria y no han dudado en venir a ayudarnos en esta situación. Además de estos, se ha reclutado personal de otras unidades para que se pudiera cubrir la ratio enfermera paciente. Me consta que se ha hecho un gran esfuerzo por parte de mis compañeros tanto por el volumen de pacientes que ingresaron en las primeras semanas como por el hecho de trabajar con los Epis y el miedo al contagio que se ha vivido a pesar de estar bien protegidos.

5.- ¿Te ha aportado algo positivo esta situación?

En primer lugar, me ha emocionado el apoyo de la población y el agradecimiento a nuestro trabajo. Además de la generosidad que han demostrado todos los que han querido ayudar bien con material, bien con otro tipo de iniciativas que nos han hecho llegar.

Además creo que se ha hecho más visible el trabajo de UCI al que llevo dedicada 20 años y creo que cuando todo esto pase deberíamos solicitar que se nos reconozca como especialidad, ya que como se ha puesto en evidencia, es un trabajo muy específico de atención al paciente crítico, que requiere una serie de conocimientos y habilidades propias que se adquieren fundamentalmente con la experiencia y que por tanto justificaría dicha especialidad.

6.- Por último, dinos que debemos cambiar a tu juicio después de haber puesto a prueba el SCS con esta pandemia.

Ahora mismo creo que lo que no debemos es relajarnos. El hospital está volviendo poco a poco a la normalidad, pero esto que hemos vivido debería servirnos para plantear con tiempo la creación de espacios para un posible repunte. También creo que el punto débil que ha mostrado esta pandemia en general en el país ha sido la situación de las residencias de ancianos. Probablemente habría que hacer un estudio de cuanto personal sanitario trabaja en estos centros y si es suficiente. Es momento para analizar lo que se ha hecho e intentar ser autocríticos. Seguro que hay cosas que podremos mejorar igual que es justo dar valor a lo que se ha hecho bien para reforzarlo.

 

Marta del Campo Arenal. "Enfermera Oncología Valdecilla".

1.- ¿Cómo ha cambiado tu trabajo por la Alarma Sanitaria?

Ha cambiado en muchos aspectos. Algunos ejemplos:
-Al uniforme le hemos añadido un complemento: la mascarilla, elemento indispensable para desempeñar nuestro trabajo. Desde que entramos hasta que salimos del hospital, la mantenemos colocada.
-Las distancias físicas entre compañeros se han modificado. Ya no se comparten zonas comunes en grupo.
-Los pasillos de la planta están vacíos. Solamente los transitamos el personal de la unidad, porque tanto pacientes como el único acompañante permitido, deben de permanecer dentro de las habitaciones.
-En nuestra unidad, nos hemos visto obligados a paralizar ciertos servicios que se venían prestando desde hace tiempo y que, de no haber sido por la alarma, continuaríamos prestándolos.

2.- ¿Has podido trabajar con el material de protección adecuado?

Nuestros pacientes oncológicos son considerados de riesgo, por el estado de inmunosupresión, comorbilidad y fragilidad. Es por eso que, en la planta, desde semanas antes de que fuese obligatorio en el hospital, el personal que les atendíamos entrábamos con mascarillas a las habitaciones y estábamos atentas si algún acompañante presentaba clínica, para indicarle la recomendación de evitar la visita. Nosotras, siempre hemos dispuesto de mascarillas; es verdad que estaban a buen recaudo y que su uso lo prolongábamos más que habitualmente, pero con seguridad. El resto del material: guantes, batas, solución hidroalcohólica, también está más controlado. Las reposiciones se hacen diariamente sobre pedido y éstas, autorizadas tras la petición, deben de estar bien medidas para que no sobren, pero que tampoco falten. Todos tenemos en cuenta que se debe de hacer un uso aún más responsable que antes, pero pudiendo utilizarlo cuando se necesita. Ahora mismo, ya se nota más disponibilidad de todo.

3.- ¿Crees que nuestro sistema estaba preparado para abordar esta crisis?

Ningún sistema, por muy potente que se precie, y es algo que se ha podido comprobar, está preparado para abordar esta situación nunca vivida por nosotros anteriormente. Es cierto que, afortunadamente, en nuestro hospital no ha existido el colapso sanitario que hemos visto en otras comunidades españolas o países. Quizás sea porque nos ha dado tiempo a prever escenarios peores y a organizar todo lo necesario según esa previsión.

4.- ¿Y crees que ha habido suficiente ratio de enfermeras por paciente?

En nuestra unidad no ha existido, en ningún momento, falta de cobertura de personal. La plantilla ha atendido a los pacientes ingresados como habitualmente. Se han realizado, como en otras unidades, modificaciones de carteleras, para dejar preservadas en su domicilio, a ciertas personas, para en caso de necesidad por aparición de algún COVID positivo entre nosotras, poder sustituirnos. De momento se ha rotado según lo previsto y sin precisar sustitución.

5.- ¿Te ha aportado algo positivo esta situación?

La capacidad de resiliencia, siempre es loable. Yo intento llevarla a cabo, pero es cierto que estoy deseando, como cualquiera, que esto termine y podamos volver a la normalidad.

6.- Por último, dinos qué debemos cambiar a tu juicio después de haber puesto a prueba el SCS con esta pandemia.

Bueno, siempre está la prevención. Y después, la reacción rápida y eficaz. La antelación es importante. Pensar que nos íbamos a librar de padecer algo así, es un poco irreal. En el mundo actual, casi no existen comunidades que por estar tan aisladas puedan evitar este tipo de pandemias. Antes o después acaban afectándose. La gravedad de las mismas, depende de la previsión y la rápida actuación. Supongo que nuestros gestores y gobernantes, hayan aprendido mucho o estén aprendiendo de esta "lección".

 

Ángel López. "Enfermero en el Centro Penitenciario El Dueso".

1.- ¿Cómo ha cambiado tu trabajo por la Alarma Sanitaria?

Trabajar con personas en prisión de por si no es fácil, pero trabajar en prisión con personas encerradas a las que se les pide que no salgan a ver a sus familiares ni en permisos, ni en las comunicaciones familiares es más complicado. La estructura en sí del día a día se ha desplazado hacia la asistencia de pacientes con sospecha por presentar síntomas y de personas que han mantenido por muy distintos motivos (judiciales, sanitarios, familiares) relación con el exterior, realizando una vigilancia exhaustiva para impedir el contagio en una institución cerrada como es la prisión. Aún así, hemos mantenido nuestra asistencia diaria a otras patologías presentes en nuestro medio y que no permiten su abandono. Es muy cierto que el comportamiento en nuestro Centro hasta la fecha ha sido ejemplar, tanto por los internos como por los empleados.

2.- ¿Has podido trabajar con el material de protección adecuado?

No. No teníamos el material adecuado hasta la semana de Semana Santa, careciendo actualmente aun de Kits de diagnóstico y esta es una institución cerrada donde el 55 % de los pacientes siguen algún tipo de tratamiento. Nos hemos ido arreglando con lo que teníamos y otros materiales donados que no eran los más idóneos.

3.- ¿Crees que nuestro sistema estaba preparado para abordar esta crisis?

En absoluto. Esta crisis ha sido la manifestación extrema de la improvisación, del “en unos días…llegará material…”. Es la manifestación en su extremo más negativo de “lo que puede pasar, acabará pasando” y, lamentablemente, y es mi más profundo deseo estar equivocado, esta no será la última vez. Ahí están los 19000 sanitarios del SNS (cuando menos) contagiados y desde luego no están así por haber usado unos equipos que no les dieron, porque no había cuando debería haberlos.

4.- ¿Y crees que ha habido suficiente ratio de enfermeras por pacientes?

En nuestro caso, en este Centro la ratio es suficiente con una enfermera por cada 75.- 100 pacientes y adecuada a la patología presente en el medio y a las actividades de enfermería que se han de realizar, que están en el punto medio entre una enfermera de un Centro de Salud y una enfermera de Atención Hospitalaria. Con respecto al SCS, con el que habitualmente tenemos una intensa y beneficiosa colaboración, no puedo opinar puesto que nuestro sistema sanitario no pertenece a el, sino al Ministerio del Interior.

5.- ¿Te ha aportado algo positivo esta situación ?

Hay que mejorar e ir un paso adelante. Hay que trabajar para estar preparados.

6.- Por último, dinos qué debemos cambiar a tu juicio después de haber puesto a prueba el SCS con esta pandemia.

Como ya mencioné anteriormente, no pertenecemos al SCS pero aun así y en función de lo que yo creo: incrementar la formación de liderazgo en catástrofes naturales a todo el personal sanitario y fundamentalmente el enfermero. Aumentar el número de enfermeras en todos los servicios y primordialmente en los más especializados. Atención primaria, Urgencias, Geriatría y Cuidados intensivos. Más enfermeras en todas la Direcciones de la Gestión de salud comunitaria y hospitalaria. Menos burócratas y políticos y más personal con conocimientos. Hay que “estar en el barro para saber dónde estás”.

 

Graciela Somonte Pérez. "Enfermera geriatra Residencia Municipal de Castro Urdiales".

1.- ¿Cómo ha cambiado tu trabajo desde la alarma sanitaria?

El trabajo sin duda se ha intensificado. A las demandas sanitarias diarias que se dan en una residencia, hay que sumar el estar en alerta continúa para detectar de forma precoz el Covid-19. Esto genera mucha tensión. Además, hay que tener en cuenta que ahora la familia de los residentes somos el propio personal y hay que tratarles, más aún si cabe, con especial delicadeza, atención y cariño. El contacto continuo con las auxiliares y las reuniones con el equipo de dirección también ocupan parte del día laboral, incluso de los días de libranza, sin desconectar en ningún momento para atender las demandas y dudas que van surgiendo entre el personal y adaptar los protocolos a las necesidades que van surgiendo.

2.- ¿Has podido trabajar con el material de protección adecuado?

Por ahora sí, pero eso no ha sido ni gracias al SCS ni a Sanidad. Días antes del R. Decreto me interesé por si tenían previsto el reparto de material a residencias, y desde luego no lo tenían previsto, parece que ni siquiera lo hubieran pensado. Así pues, la coordinadora de mi centro se puso en contacto con varias empresas suministradoras para ir recolectando material y con ello hemos ido tirando. Lo que nos llega desde el ICASS es insuficiente, aunque se empieza a notar la llegada de material. Aún así, sigo con la idea de que si las residencias no hubieran sido noticia, seguiríamos siendo las grandes olvidadas a pesar de trabajar con un colectivo de máximo riesgo.

3.- ¿Crees que nuestro sistema estaba preparado para abordar estas crisis?

Desde luego que no. A la vista están los resultados. Ahora es cuando realmente se ha visto la escasez de medios, sobre todo profesionales. Llevamos varios años con recortes y trabajando con el mínimo de personal y ahora se han visto las deficiencias. En las residencias por norma general ya se trabaja con muy poco personal. Los ratios son ridículos e indignantes. Sin duda, uno de los motivos por lo que algunas residencias no han podido hacer frente a esta crisis. Espero que después de esto se haga un replanteamiento de la situación y que desde las administraciones se dé a los cuidados de geriatría la importancia que tienen.

4.- ¿Crees que ha habido suficiente ratio de enfermeras?

Un NO rotundo. En las residencias nos vemos desbordadas ya a diario. Ni si quiera se nos tiene en cuenta por parte de la administración Cántabra a la hora de elaborar los ratios, no es obligatorio tener Enfermeras en las residencias, situación que denuncio desde aquí. No conozco la situación en hospitales así que no puedo juzgarla, pero doy por hecho que con esta crisis se ha disparado de manera brutal el número de pacientes por enfermera. Mi ánimo a todas mis compañeras, estamos dando el 1000x1000, haciendo posible con mucho esfuerzo que esa escasez de personal se note lo menos posible en la atención.

5.- ¿Te ha aportado algo positivo esta situación?

Si, desde luego. La unión de todos mis compañeros. El trabajo en equipo es impecable. Esta situación nos ha hecho remar a todos en la misma dirección olvidándonos de las diferencias entre nosotras y centrándonos en el principal objetivo, que en estos momentos es proteger a nuestros mayores del Covid-19 manteniendo su calidad de vida y sus cuidados diarios.

6.- Por último, dinos qué debemos cambiar a tu juicio después de haber puesto a prueba al SCS con esta pandemia.

Principalmente que se de peso a lo que tiene peso. Que no escatimen en personal, sobre todo en residencias. Que hagan una revisión de los ratios que hace mucha falta. Habiendo personal suficiente, las crisis se superan y se controlan de una manera más eficaz.


María Isabel Martínez García. "Enfermera cuidados paliativos".

1.- ¿Cómo ha cambiado tu trabajo por la Alarma Sanitaria?

Nuestro trabajo no ha cambiado significativamente, somos un equipo de apoyo domiciliario y seguimos realizando nuestras visitas como lo estábamos haciendo de manera habitual, eso sí, extremando las medidas de protección.

2.- ¿Has podido trabajar con el material de protección adecuado?

Si, nos dotaron de todo tipo de material (mascarillas, batas desechables, un delantal impermeable, EPI, pantalla de protección ocular) para que nuestras visitas fuesen lo más seguras posibles.

3.- ¿Crees que nuestro sistema estaba preparado para abordar esta crisis?

Pienso que nadie está preparado para abordar una pandemia así, pero todos estamos aportando nuestro granito de arena para resolver este problema lo mejor posible.

4.- ¿Y crees que ha habido suficiente ratio de enfermeras por pacientes?

En mi unidad sí.

5.- ¿Te ha aportado algo positivo esta situación ?

Si ́, el gran trabajo en equipo que se está realizando, el compañerismo, la empatía, el reconocimiento... Saldremos reforzados personal y profesionalmente.

6.- Por último, dinos qué debemos cambiar a tu juicio después de haber puesto a prueba el SCS con esta pandemia.

Era una enfermedad grave y desconocida, pienso que todos hemos actuado lo mejor que sabíamos dentro del miedo y el desconocimiento de esta situación.


Priscila Egusquiza Valverde. "Matrona en el servicio de partos del HUMV".

1.- ¿Cómo ha cambiado tu trabajo por la Alarma Sanitaria?

Mi trabajo ha cambiado sustancialmente en las últimas semanas por el hecho de la llegada del COVID al Hospital y por tanto a mi servicio. Están siendo unas semanas duras de cambios continuos en los protocolos de actuación en nuestro caso ante la gestante COVI (+) y a su manejo desde nuestra perspectiva de matronas. Nos hemos tenido que formar para poder ofrecer una atención más completa en incluso en la propia toma de muestras a la paciente y su protocolo de recogida para salvaguardar el área de partos en la mayor de las medidas. Están siendo unos días estresantes pero que nos están haciendo crecer profesionalmente.

2.- ¿Has podido trabajar con el material de protección adecuado?

En cuanto al material, es verdad que inicialmente nos vimos más expuestas en cuanto a las pacientes ante las que no teníamos conocimiento de su posible infección por la falta de pruebas diagnósticas. En cambio, desde primer momento, nuestra supervisora preparó una serie de kits para que, ante la llegada de una gestante infectada, nos viéramos 100% protegidas. Con el paso de los días ha ido llegando a nuestro servicio cada vez mejor nivel de protección y están mejorando las pruebas de detección precoz de paciente positiva. Durante la espera ante ese COVI indeterminado nos estamos protegiendo bastante bien.

3.- ¿Crees que nuestro sistema estaba preparado para abordar esta crisis?

Sinceramente, creo que nuestro sistema no estaba lo suficientemente preparado para recibir un problema de este calibre porque creo que de alguna manera se podía llegar a pensar que “aquí no iba a llegar”. Pero sí bien es cierto que, de momento, se está pudiendo dar cobertura a todo porque creo que el Hospital se está “reinventando” cada día y ante nuevas situaciones se intentan plantear nuevas soluciones. Pero siempre vemos las cosas a toro pasado, no sólo nuestra comunidad, el tema ha sido España en general. Creo que se cometieron muchos errores que ahora estamos pagando.

4.- ¿Y crees que ha habido suficiente ratio de enfermeras por pacientes?

En cuanto al tema de ratio de enfermeras por paciente mi problema es que al estar ubicada en la unidad de partos estoy un poco desconectada de nivel asistencial y del ratio que se están llevando en las plantas de Hospitalización. Me temo que en este tema no puedo opinar.

5.- ¿Te ha aportado algo positivo esta situación ?

Me atrevería a decir que este asunto me ha hecho ganar muchas cosas en positivo. Creo que he intentado adaptarme a la situación sacando la mejor parte de mí siempre intentando ser positiva ante las adversidades, no buscando más problemas a la situación sino intentando dar soluciones porque de lo que se trata en este momento es intentar “quitar trabajo” y no darlo. Esta situación me ha hecho crecer profesionalmente y me siento más preparada para atender partos en situaciones de crisis.

6.- Por último, dinos qué debemos cambiar a tu juicio después de haber puesto a prueba el SCS con esta pandemia.

En cuanto a los aspectos modificables por parte de SCSALUD, en mi caso más que por criticar aspectos logísticos o de suministro pasaría sobre todo por valorar más al personal que hemos prestado nuestros servicios de manera intensiva en esta situación de crisis. Al principio con mucha incertidumbre ante la situación y con pocas ayudas, y, sobre todo, el miedo a lo desconocido. Creo que estar en primera línea de fuego te abre los ojos y te hace valorar más que tu trabajo sea reconocido y agradecido que cualquier otra cosa. Cada noche cuando llegó a mi puesto de trabajo repaso en mi mente todos los pasos a seguir ante una situación de riesgo, no tanto por el problema de contagiarme yo, sino porque al igual que yo el resto de sanitarios tenemos familia y el miedo a que a ellos les pueda pasar algo por mi exposición es lo que me hace el día más duro. Así que repaso en mi mente los pasos para protegerme lo mejor que pueda.


Eva María Villanueva Sotorrio. "Centro Salud. Dr. Morante (General Dávila), Santander.".

1.- ¿Cómo ha cambiado tu trabajo por la Alarma Sanitaria?

El trabajo ha tenido que cambiar forzosamente adaptándose a la nueva situación que la alerta sanitaria ha generado. Hemos tenido que ir adaptando el centro y nuestra manera de trabajar siempre pensando en la mayor seguridad tanto para el personal, que ahora trabaja con equipos de protección, como para nuestros pacientes, dando mayor énfasis a la atención telefónica y domiciliaria y evitando en la medida de lo posible su presencia física en el centro, sin dejar de lado el trabajo que veníamos realizando antes de entrar en el estado de alarma. Estamos en continua evolución y siempre pendientes de cambios y creando nuevos protocolos de actuación.

2.- ¿Has podido trabajar con material de protección adecuado?

Al comenzar esta situación no disponíamos del material necesario para realizar con seguridad nuestro trabajo, la precariedad se convirtió en necesidad y despertó la imaginación del equipo que buscó formas alternativas de protección, consiguiendo donaciones de material de familiares y conocidos y fabricando nuestros propios EPIS.

Realizamos las visitas domiciliarias a pacientes con Covid + o sospechosos de serlo en nuestros propios vehículos con el riesgo que eso implica para nosotros y nuestras familias. Hemos echado en falta test a los profesionales durante gran parte de esta pandemia y ahora que se han empezado a realizar, reclamamos la periodicidad de los mismos, para nuestra seguridad la de nuestras familias y pacientes.

Ahora disponemos de mas material de protección, pero nos queda la incertidumbre, sobre todo con las mascarillas KN95, de saber si son seguras, ya que varios modelos de los que hemos utilizado no lo eran.

3.- ¿Crees que nuestro sistema estaba preparado para abordar esta crisis?

Ningún sistema estaba preparado para una crisis sanitaria de esta magnitud, ni el sistema social, ni el político ni el sanitario. Sobre todo lo hemos notado a nivel de organización con continuos cambios e improvisaciones en muy cortos espacios de tiempo, pese a todo gracias al gran esfuerzo realizado por el equipo humano que formamos la plantilla de nuestro Centro de Salud, el trabajo se ha ido sacando adelante con unos buenos resultados, tratando de que estos continuos cambios no afectaran a nuestra atención con los pacientes.

Ahora la principal preocupación está en controlar las nuevas fases de desescalada y evitar así repuntes traumáticos que nos hagan retroceder.

4.- ¿Crees que ha habido suficiente ratio enfermera paciente?

En el caso de nuestro Centro ya partimos con un ratio insuficiente, siendo varias las enfermeras que llevan mas de un cupo médico, esta crisis con la nueva organización ha agravado aún mas si cabe estas carencias, ya que en estos momento además de nuestro trabajo habitual, estamos realizando nuevas tareas colaborando en tareas de contención en la puerta del centro y realizando el Estudio Nacional de Epidemiología de infección por Covid-19 en Cantabria.

Además, hemos visto ampliado nuestro horario trabajando los festivos de Semana Santa y fines de semana aumentando la sensación de cansancio físico y mental ya de por sí agravado por la situación.

Vuelvo a incidir en este punto en la gran respuesta de mi equipo de enfermería, que han puesto todo su empeño y esfuerzo en que estas carencias de personal no hayan afectado al trato con el paciente, así como resaltar su magnifica disponibilidad a la hora de aceptar los nuevos retos que esta situación ha demandado

5.- ¿Te ha aportado algo positivo esta situación?

Soy una persona de naturaleza positiva y me gusta siempre sacar de situaciones complicadas lo mejor con lo que me pueda quedar, en este caso quiero quedarme con el compañerismo en mi centro, la colaboración y la empatía han sido las piezas claves y dominantes para sacar adelante todos unidos una situación laboral y emocional tan dura como la que nos ha tocado pasar.

El apoyo que hemos sentido de nuestros compañeros y la sociedad en momentos complicados han sido importantísimos para que día a día fuéramos a trabajar con la ilusión de estar haciendo algo bueno.

6.- Por último, dinos que debemos cambiar a tu juicio después de haber puesto a prueba el SCS con esta pandemia.

Creo que esto nos hace poner en valor el Sistema Sanitario del que disfrutamos, por lo que pienso que no se debe de escatimar en presupuestos dedicados a sanidad e investigación para no volver a encontrarnos en la misma situación de precariedad si una situación así se repitiera.

Se debe de potenciar y dotar con mas medios materiales y personales a la Atención Primaria ya que es una pieza clave en las medidas de detección y contención ante posibles emergencias. Sería importante mejorar la coordinación y comunicación entre gerencias para poder llevar a cabo protocolos de actuación en común.

Sería necesario un cambio de mentalidad en la sociedad a la hora de valorar a los sanitarios cuando todo esto termine, que piensen que nuestra labor es continua y que se nos valore por nuestro trabajo diario a través del tiempo no solo en momentos dolorosos y puntuales. Ahora quiero acordarme de toda la gente que esta pandemia ha dejado en el camino, entre ellos el personal sanitario, deseo mandar mi mas sincero pésame a todas sus familias y compañeros.

 

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